Maelstrom

1. Desde el ayer 


La joven propietaria de la cafetería Sarah Bailey ha finalmente superado la misteriosa desaparición de su esposo de hace dos años y está esperando con ansias una nueva vida para ella como mujer soltera. Ella no cuenta con conocer a Isaac Quinn, el multimillonario magnate de la tecnología, que se dispone a seducir a la preciosa Sarah. Incapaz de resistir la increíble conexión entre ellos, pronto comienzan una apasionada y sensual relación que rápidamente se convierte en noticia de primera plana en las columnas de chismes.
Su felicidad se ve empañada cuando Sarah atrae a un celoso acosador que le envía amenazas e Isaac comienza a preguntarse si su fama y su estatus han puesto a la mujer que ama en un terrible, terrible peligro…

2. Aquí ahora 


El olor lo golpeó y él se atragantó. Su estómago se encogió de miedo. Él sabía lo que significaba ese olor. Tomando una respiración profunda, entró. El remolque estaba en la oscuridad, el hedor de la muerte era abrumador. Oyó el zumbido de las moscas, encendió su linterna, una mano en el revólver de servicio por si acaso.
Una mujer yacía desplomada desnuda en una silla al otro extremo del remolque. En el suelo, junto a ella, una navaja de mango largo. Sus muñecas, su cuello, cortados en pedazos. Su sangre rociada sobre la mesa frente a ella, los gabinetes, la desgastada banqueta. Se hizo un charco en el suelo.

3. Pasado futuro 


Sarah se alejó de su ex-marido, su respiración se contuvo y se atoró en su garganta. La sonrisa de él parecía amable, pero sus ojos lucían fijos y muertos. Él estaba cambiado. Más duro. Su cara, una vez delgada, estaba regordeta y su cabello era más fino.
Él dio un paso hacia ella, puso sus manos sobre sus hombros y cuando ella trató de quitárselo de encima, él apretó su agarre.
‘No seas tonta, Sarah, ¿por qué luces asustada? Soy yo.’
Su voz, Dios, hasta su voz la asustaba, tan suave como era, casi en un susurro tierno. Podía oler su jabón de pino.
‘Dan... ¿Qué quieres?’ aún más que saber ‘¿Dónde demonios has estado?’ ella quería saber eso ¿Qué quería él con ella, en este momento?
Dan se inclinó y la besó suavemente antes de que ella pudiera escaparse. Pasó un dedo por la mejilla de ella.

4. Ahora por siempre


La joven propietaria de la cafetería Sarah Bailey ha finalmente superado la misteriosa desaparición de su esposo de hace dos años y está esperando con ansias una nueva vida para ella como mujer soltera. Ella no cuenta con conocer a Isaac Quinn, el multimillonario magnate de la tecnología, que se dispone a seducir a la preciosa Sarah. Incapaz de resistir la increíble conexión entre ellos, pronto comienzan una apasionada y sensual relación que rápidamente se convierte en noticia de primera plana en las columnas de chismes.
Su felicidad se ve empañada cuando Sarah atrae a un celoso acosador que le envía amenazas e Isaac comienza a preguntarse si su fama y su estatus han puesto a la mujer que ama en un terrible, terrible peligro…