Callie Hutton (Los Sutherlands del castillo de Dornoch)

 1. El engaño de un highlander

Se casó con la hermana equivocada... ¿o no?
El Terrateniente Haydon Sutherland ha tomado una decisión. Ha llegado el momento de casarse y le ha ofrecido matrimonio a Lady Elsbeth Johnstone, una chica tranquila y recatada que no le dará ni un solo día de preocupación...
Lady Ainslee Johnstone, la testaruda y luchadora melliza de Elsbeth, no permitirá que el matrimonio se lleve a cabo. La arrogante y feroz Sutherland destruirá a su dulce hermana, así que cambian de lugar el día de la boda.
Que comiencen las batallas...

2. Casarse con un highlander  

Él jamás planeó que los descubrieran...
Conall Sutherland, el hermano menor y mano derecha de Haydon, el Terrateniente del Clan Sutherland, vivía feliz. O eso creía hasta hace poco. Nunca sintió el llamado del matrimonio, disfrutando del calor de las damas que le ofrecían refugio en sus lechos. Sin embargo, últimamente, algo en su alma se sentía fuera de lugar.
Maura Mac Ewan, su prima lejana, siempre albergó un dulce anhelo por él, pero consciente de su fama de libertino, reprimió sus sentimientos, temiendo el dolor de un corazón roto. Cuando el destino los unió en la oscuridad, en un abrazo que nada tenía de pecaminoso, la inocencia no importó. Su padre y hermanos, inflexibles, les dejaron un solo camino:
El matrimonio.
La esperanza de Maura por una dicha conyugal se desvaneció cuando las numerosas mujeres del castillo, que habían compartido la cama de su nuevo esposo, comenzaron a acosarla, sembrando la discordia. Intentaban hacerla miserable, coqueteando descaradamente con Conall. ¿Podría confiar en que él había abandonado su vida de desenfreno? ¿O estaba condenada a vivir con un hombre en quien jamás podría depositar su confianza?
Y entonces, el destino, con su ironía cruel, decidió complicar aún más la trama de sus vidas...

3. Rendirse a un Highlander 


El Laird Duncan Grant no quiere que sus clanes vecinos, los MacIntosh y los MacPherson, formen una alianza mediante el matrimonio planeado entre sus descendientes. Sería una situación peligrosa para su clan. Como necesita una esposa, decide secuestrar a la novia de camino a la boda y quedársela para sí. Pero elige a la muchacha equivocada. Lady Elsbeth Johnstone está cansada de vivir a la sombra de su hermana gemela. La ama profundamente, pero es hora de que tenga su propia vida. Sin perspectivas de matrimonio, decide que un convento en Perth es el lugar para ella. En la oscuridad de la noche, durante su viaje a Perth, una banda de hombres la separa de su escolta pensando que es otra persona. Furiosa por cómo su vida está ahora otra vez fuera de su control, exige al Laird Grant que la lleve al convento en Perth. Enfadado por el error cometido, acepta, pero no puede evitar preguntarse si podría domar a la enérgica muchacha y convencerla de que se quede. Después de todo, necesita una esposa.

4. Para fastidiar a un highlander


El primer encuentro a veces es un espejismo...
A Malcolm Highlander Sutherland, primo del Terrateniente Haydon Sutherland, se le ha ofrecido la oportunidad de desposar a la hija del Terrateniente Bryce Ross. Para persuadir a los Ross de conceder la mano de su hija a su primo, Haydon ha accedido a obsequiar a Malcolm con una porción de las tierras Sutherland.
Lady Christine Ross es la hija menor del Terrateniente Bryce Ross, y su padre anhela verla partir del castillo, especialmente desde que el hermano de Christine contrajo matrimonio y las dos jóvenes no congenian.
Christine, que aguarda con ilusión el matrimonio y una nueva vida, se estremece al descubrir, al llegar al Castillo Dornoch, que su prometido es aquel hombre que conoció en los Juegos de las Tierras Altas el año anterior. En su memoria, él era un hombre severo, distante y altivo. Por su parte, Malcolm no puede creer que su futura esposa sea aquella muchacha volátil e irresponsable de los Juegos de las Tierras Altas.
¿Es acaso este es un destino sellado en el cielo? ¿O forjado en las profundidades del infierno?