Cari Z.

Sobreviviendo al cambio

Un shifter sin un compañero, un hombre que tiene miedo de confiar. El tiempo está contra ellos e incluso el amor no puede ser bastante para sobrevivir el cambio. Dan Bailey es un solitario. Un shifter sin una manada y que ninguna manada aceptaría a menos que tenga un compañero.

Solo busca trabajo y unas cuantas cervezas con los amigos cuando conoce a Blythe Kenner, y de repente sus prioridades cambian.

Blythe no confía en nadie especialmente en los shifters. Todo lo que quiere hacer es seguir trabajando detrás de la barra hasta que obtenga su licenciatura en Derecho. Eso es hasta que Dan entra y hace de su única vocación meterse bajo la piel de Blythe y sus cubiertas.

Blythe nunca contó con tener como amante a un shifter, y decir complicado no empieza a describir de cómo se siente.

Dan sabe como se siente y no va a dejar ir a Blythe sin una pelea. Pero el tiempo se esta acabando. Una manada rival no esta feliz con el alojamiento de Dan, y si Dan no puede ganarse a Blythe pronto, sus vidas estarán en juego.

Vale la pena esperar

Cuando Tate promete a su sobrina Addie que obtendrá un libro firmado por su autora favorita, nunca hubiera esperado acabar en una cola kilométrica de cuatro bloques, bajo una lluvia helada de agua nieve. Faltan tres días para Navidad, hace frío y se siente miserable, pero Addie quedará desolada si él renuncia ahora. Cuando está pensando en tirar la toalla, un chico lindo le ofrece un paraguas, y ese es sólo el estímulo que Tate necesita para animarse, especialmente cuando Brandon regresa, y le trae algo caliente para beber.

Pero la firma de ejemplares acaba, antes de que Tate haya llegado a la parte delantera de la cola, Tate es muy consciente de que ha arruinado la Navidad a su sobrina.

Por suerte, Brandon, logra que Tate vea a la autora, que resulta ser la madre de Brandon. Un simple gracias, no parece ser suficiente, y ninguno de los dos quiere terminar su conexión todavía. Para dos hombres que han sentido una mutua atracción inmediata, la Navidad es ahora un poco más feliz.