1. Te robe un beso
Sara Martínez; veintinueve años, soltera, mujer de armas tomar, aunque muy insegura de sí misma. Huye del amor por una turbia relación del pasado y busca una vida normal, tranquila y sin ataduras. Le encanta su trabajo y vivir el día a día junto a su mejor amiga, Patricia.
César Fernández; treinta años, soltero, mirada inolvidable y un cuerpo que incita al pecado. Un Don Juan en toda regla. El típico ``chico malo´´ al que su padre intenta encarrilar, sin éxito alguno. Con una vida desahoga, gracias a un ``golpe de suerte´´.
Sus caminos se juntan sin esperarlo y una atracción letal, les arrastra por completo. Lo que Sara no sabe, es que Cesar, oculta un pequeño secreto que ella jamás esperaría y un encuentro en el pasado que no recordaba.
¿Podrá un ladrón de corazones robarle un beso y derribar las barreras de su corazón?
3. Rompiendo mis esquemas
Si alguna vez alguien le hubiera preguntado qué era lo más importante en la vida, ella hubiese contestado; que yo existiera.
Berta, una mujer segura de sí misma, con un futuro prometedor dentro de una editorial como editora de novela romántica, algo que ella jamás fue. Arisca y gruñona, de simpatía selectiva y con un gran potencial para levantar pasiones, vive sin ningún miramiento hacia nada, ni nadie.
Luis, un hombre con rasgos árabes por el que cualquier mujer babearía sin ser siquiera consciente, romántico hasta la medula, simpático y con un corazón que no le cabe en el pecho, buscará la manera de entender a Berta hasta su último aliento, a pesar de luchar contra un imposible.
Un matrimonio a cuestas, unos cuantos tropiezos en el pasado, errores que les marcaran de por vida y un amor que nunca se apagó, harán que los días de Berta se conviertan en una auténtica tortura… ¿o no? ¡De eso ya se encargará Luis!
¿Podrán superar el pasado y construir un futuro? Dicen, que donde hubo fuego, siempre quedan cenizas…
4. Adueñándote de mi corazón
Dicen que todo en la vida tiene un motivo, que de los errores se aprende y que el amor no se busca, si no que llega solo y sin avisar.
Tras la íntima boda de Berta y Luis, Rubén, continúa su vida en solitario como de costumbre, solo que esta vez, se apoya en una de las personas más especiales de “la familia”; Rocío.
Rocío una mujer extrovertida, modesta e inexperta en el amor dadas las circunstancias de su vida, decide pedirle consejo a su fiel amigo; el Rompebragas.
Juntos crearán un tremendo revuelo entre sus alocados amigos, los cuales no descansarán hasta conseguir su anhelado propósito. Mientras que a Rubén, el destino le golpeará de nuevo, haciendo que su vida de un giro de trescientos sesenta grados.
¿Cuál es la línea que separa la amistad del amor?
Cuatro historias independientes, cuatro finales distintos, ¿Te vas a perder la última parte de la saga?