Seth Bannock vive una mentira. Nada en su vida está funcionando. Le gustan las mujeres. Respeta a las mujeres. Pero cuando se trata de besar a una mujer y ella lo hace con lengua, le dan ganas de vomitar.
Confundido por la reacción de su cuerpo a los hombres en su gimnasio, Seth busca ayuda en el único club gay que conoce.
En busca de respuestas, el dulce e inmaculado virgen se encaminó al club de BDSM a hablar con el dueño, Rio Knight. Pero se da cuenta de que había estado en el equipo equivocado toda su vida. Un Adonis de metro ochenta y tres centímetros llamado Matt Duffey, se presenta delante de él. De forma inmediata se siente atraído por el macho alfa vestido de cuero, Seth debe abandonar su antigua vida y aceptar su orientación sexual recién descubierta.
Seth pensó que en su vida había complicaciones antes de conocer a Matt, pero nada se acerca al viaje en montaña rusa que le provoca los grandes brazos del dom.