1. Para no perdonar
Una noche tardía. Una carretera helada. Un coche atropellado por un árbol.
Cuando la detective Liz Moorland ve los rostros sin vida de la hija y el yerno de su antiguo colega, sabe que es suficiente para llevar a Vince Carter al límite.
Vince, un policía retirado, amargado y solitario, fue una vez un héroe para muchos. Pero a sus ojos, ha fallado a los que más quería. Alejado de su hija antes de su muerte, la enormidad de su pérdida es inconmensurable.
Mientras Liz persigue a un delincuente fugado, Vince, además de luchar por la custodia de Melanie, su nieta de ocho años y única superviviente del accidente, desarrolla una convincente teoría de que no fue un accidente.
La teoría de Vince proporciona a Liz una conexión inesperada con su caso y, al mismo tiempo, suscita preocupación por la seguridad de Melanie y por lo que vio aquella fatídica noche.
Esas preocupaciones están justificadas. Una persona sabe lo que vio la chica.
El asesino.
2. Para no cerrar puertas
No adiós, tía. Sólo hasta la próxima.
Un niño ha desaparecido. La Detective Sargento Liz Moorland de Homicidios ha visto esto antes. Otra niña, hace dieciocho años. El mismo color de pelo y ojos. La misma sonrisa dulce. El mismo parque. Nunca encontrada.
Liz tiene una conexión con ambas desapariciones y está convencida de que están relacionadas. Pero si quiere encontrar a esta chica, tiene que mantener la cabeza fría. Y con la posibilidad de ser apartada del caso más importante de su vida, Liz no puede permitirse cometer un error.
Todos los indicios apuntan a un secuestrador en serie, pero cuando el secuestrador llama, sólo quiere tratar con Liz. ¿Es una cruel coincidencia o una trampa bien urdida, planeada durante décadas?
Acosada por las últimas palabras de su sobrina, Liz hace una promesa a ambas niñas.
Hará lo que sea necesario para traerlas a casa. Incluso si eso significa arriesgar su carrera. Y su vida.
3. Para no cambiar el rumbo
Es una crack. Una artista que fue famosa. Y desaparecida.
El mundo de la detective Liz Moorland cambió con el último caso. Era la primera vez que rompía las reglas, pero obtuvo el resultado que necesitaba y atrajo la atención de un nuevo equipo encubierto. Ahora tiene los recursos que necesita para seguir la pista del hombre que ha hecho de titiritero de su vida durante décadas. Un hombre al que todos dan por muerto… otra vez.
Pero la extraña desaparición de un viejo amigo se convierte en la prioridad del equipo. Lyndall ayudó a salvar la vida del ex sargento Vince Carter el año pasado. Su única vecina en una remota zona de Victoria, es un enigma con un oscuro pasado y una habitación del pánico integrada en su casa.
¿Quién es Lyndall… o quizás más importante, quién era? ¿Y dónde está ahora?
Mientras Liz y el equipo planean un audaz rescate, el peligro acecha donde menos se lo esperan.
Desde sus propias filas.
