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Stephen King

Las cuatro estaciones I . Primavera y verano


A los veinte años le internaron en prisión, y ahora se encarga de conseguir a los otros internos todo lo que le soliciten, sea lo que sea.
También es capaz de concebir el plan más increíble para lograr escapar de prisión, incluso si tiene que recurrir a la misma Rita Hayworth . . .
Un niño reconoce en un vecino suyo a un conocido nazi y usa la información para, con refinada perversidad, abusar del anciano para conseguir sus «satánicos» objetivos.
Con esperanza, primavera eterna y verano de corrupción, los relatos convertidos en sendas películas (especialmente reconocida ha sido la primera, Cadena perpetua), Stephen King accede a los niveles más profundos, y los más inquietantes, de la mente humana.