.

.
.

Stephen King

Cementerio de animales


Una alucinante incursión en terrenos que van más allá del horror y de la capacidad de comprensión humana.
Church estaba allí otra vez, como Louis Creed temía y deseaba.
Porque su hijita Ellie le había encomendado que cuidara del gato, y Church había muerto atropellado.
Louis lo había comprobado: el gato estaba muerto, incluso lo había enterrado más allá del cementerio de animales.
Sin embargo, Church había regresado, y sus ojos eran más crueles y perversos que antes.
Pero volvía a estar allí y Ellie no lo lamentaría.
Louis Creed sí lo lamentaría.
Porque más allá del cementerio de animales, más allá de la valla de troncos que nadie se atrevía a trasponer, más allá de los cuarenta y cinco escalones, el maligno poder del antiguo cementerio indio le reclamaba con macabra avidez . . .