.

.
.

David Uriach

Víctima de Grey


Frederic, aburrido de la monotonía de su trabajo y de la que se respira en su hogar, decide dar un giro a su vida intentando emular al guapo y rico protagonista de un gran éxito editorial, que también ha cautivado a su esposa Txell. Los resultados de su primer intento no son los esperados y la alargada sombra del personaje lo perseguirá en todos sus actos.
Hace cierto tiempo la trilogía iniciada con «Cincuenta sombras de Grey» de E.L. James, causaba furor entre las mujeres. Dondequiera que me encontrara, en el parque, en el tren, en el supermercado, en el hospital. siempre había una señora con un ejemplar entre manos. Empujado por la curiosidad decidí leer el primer volumen. Tras la lectura constaté que mis pretendidos conocimientos de la sexualidad femenina eran erróneos. ¿Cómo era posible que la sumisión de una chica joven frente a un guapo adinerado tuviera tanta aceptación? ¿Cómo podía despertar tanta envidia una mujer zurrada como una piñata?